Mañana me pongo en camino a Gijón. Con eso del tiempo, las galernas, temporales y todo lo demás que siempre dan para el norte uno tiende por optar hacia el escepticismo en estas materias.
En la entrada anterior salió el tema de El Cometa, no voy a entrar a fondo con ello pero sí con la de vaqueros que compré allí; Wrangler, Lee , Levi´s como los que me gustaban y Lois, Old Chap, Cimarron, Chipie.....¿queréis aumentar la lista...? .....y.por último.....¡qué escaleritas tenía el primer local para subir a la zona de los vaqueros!
Ja ja ja ¿pero cómo te puedes acordar de tantas cosas? es cierto lo que dices. Yo allí me compré mis primeros vaqueros unos LEE 1.000 calas me costaron supongo que sería sobre el 72 ó 73. En mi casa "no se compraban vaqueros" y menos a ese precio, así que un verano estuve cogiendo ocle con uan gente durante unos cuantos días y lo que gané fue pa compralos.
ResponderEliminarSlds Javier
Yo tuve menos suerte, no me quedó otra que conformarme mirando el escaparate. Sólo compré un cinturón de hebilla grande,allá por 68. Y es que, en aquel año, por muy práctico que fuese, para mí la utopía no llegaba ni las playas estaban debajo de los adoquines
ResponderEliminarGran ejemplo Javier. A ver si algun chavalin de los de ahora toma nota y se pone a doblar el espinazu para pagarse aunque sea el movil o el botellón.
ResponderEliminarVirginia
HOLA LUIS: PASO A DEJARTE MI SALUDO Y BUEN COMIENZO DE MES .-
ResponderEliminarABRAZOS
Rok, Caroche, Caster....en fin marcas de otra época.
ResponderEliminarAcabo de llegar de Gijón y os agradezco vuestras entradas.
Muy buenos los comentarios que hacéis ¿hasta qué punto podía llegar para un chaval de hace años el tener unos buenos vaqueros...? . Los Levi´s eran los dioses, los más caros y los que marcaban un caché . Si eran etiqueta naranja vaya , ¡pero si eran de etiqueta roja no veas!. Yo tengo que reconocer que los que mejor me sentaban eran los wrangler.
Tenía amigos que se duchaban con ellos puestos nada más comprarlos ante la leyenda de que así se hacían mejor al cuerpo de cada uno.
En el paleolítico inferior en que yo viví la primera juventud, los LEE eran de lo más. Sobre anécdotas relacionadas con los vaqueros, estaba aquella leyenda sobre el uso de la lejía para envejecerlos. Su uso ocasionó notables fracasos, en forma de goterones blanquecinos desparramados a lo largo de las perneras. Hubo quien los golpeaba con una piedra humedecida en agua de mar. Todo por que no luciesen de estreno. Con el tiempo, las marcas supieron dar cauce a tanta afición y lanzaron líneas envejecidas, hasta llegar al descojone de presentarlos hechos unos zorros, con múltiples desgarrones. Eso sí, cuanto más deterioro, más precio. El mundo al revés.
ResponderEliminarMuy bueno tu comentario Manuel, me recuerda un poco los experimentos del Flipy en el hormiguero . Efectivamente ¡se hacía cada cosa con los vaqueros!
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