Para el verano de 1955 Gijón vendía sus maravillas naturales junto a la modernidad en el transporte. La llegada de la robusta locomotora inglesa de la imagen - que tanto veríamos rodar por Asturias - conectaba nuestra ciudad con las líneas ferroviarias electrificadas.
Ahora la lucha o luchas son otras....; las estaciones, el AVE, el solarón ....¡qué gran espacio verde sería para Gijón!