Cuando se fundó "la Ciudad de Londres" una corriente de "europeísmo elegante" barría las denominaciones de muchos de los grandes comercios de Gijón, especialmente los relacionados a tejidos, paños, zapaterías...Así ,encontramos nombres como:"La Villa de París","La Parisien","Calzados París",Bienvenido Sastrería Inglesa", "Trianón","Tintorería París", "Casa Viena"....
En la plaza en la que estaba situado el gran almacén se hicieron numerosas reformas, llegó a pasar el tranvia y la solidez de su edificio mantuvo con orgullo los escudos de ambas esquinas que aún hoy podemos observar hoy día.
De las actuales rebajas de enero hace setenta años usaban otra denominación en los comercios: "Barato".
En 1930 la imagen publicitaria de los almacenes era atractiva y con un toque cosmopolita, "un pequeño Corte Inglés".
Uno de los dos escudos con la vieja denominación tal como se conserva hoy en día en una de las esquinas. Probablemente si hiciéramos una encuesta a los transeúntes que pasan por el esquinazo sobre su significado, pocos sabrían responder el origen del mismo.
Como todo Gijón , los almacenes sufrieron los rigores de la Guerra Civil. En la imagen vemos estas gijonesas correr ante una alarma aérea. Las cintas adhesivas colocadas en los cristales trataban de proteger los mismos ante las ondas de las explosiones. Se buscaba una cierta estética geométrica en su colocación.
Tras la guerra desaparecerían no sólo las torres de San Lorenzo ,que vemos en la imagen, también lo haría la denominación de almacenes "La ciudad de Londres" . LLegaría en la posguerra en el mismo solar un nuevo comercio ,"Almacenes Soto", que muchos Gijoneses conocimos y del cuál aún conservamos algún recuerdo. En mi caso , en mi familia conservamos una guitarra española con la pegatina interior de almacenes Soto. Está claro que de la venta de tejidos al por menor se pasaba a una venta más parecida a lo que sería un bazar.
Creo recordar que almacenes Soto cerró en los años 70, seguramente en la segunda mitad. Durante bastantes años la imagen de su edificio parecía más la de Berlín en la segunda guerra mundial que la de un gran negocio que tuvo bastantes años de bonanza.
Me comentó un viejo trabajador de Soto que en los años 50 ,el dueño tenía la costumbre de que todos los empleados que tuvieran que hacer algo ,tras hablar con él o salir del local, le comentaran la coletilla "se le ofrece alguna cosa más don...."
En la actualidad el uso residencial , los "recrecidos" y la imagen que veis distan mucho de la que tuvo en sus orígenes pero.....afortunadamente conserva algunos elementos originales .
Nuevos comercios, curiosos miradores y un pedazo de la historia de Gijón conservada....en parte.