viernes, 19 de julio de 2019

LA MAGIA DE NUESTRA PLAYA DE SAN LORENZO


fondo Patac
Nuestra querida playa de San Lorenzo en bajamar a comienzos del siglo XX. Era la época de los baños de ola y las del "sábanu", esto es las personas que envueltas en sábanas, como fantasmas, iban a las seis de la mañana a meterse en el Cantábrico cogiéndose de las maromas (las cuerdas que estaban a modo de salvavidas, colgando de la orilla hasta el interior del mar)
fondo galicana
Toda una referencia para los gijoneses y sorpresa para los visitantes es nuestra playa. De ella salían dichos de todo tipo : "vete a cagar a la playa; y si no te gusta, a la Atalaya" o textos más descriptivos como éste de Víctor Labrada : "La playa, temida y abandonada hasta entonces, pasa a ser un gran negocio del que obtienen remuneradores beneficios los propietarios de casetas, bañeros, barquilleros, vendedores de muñecas de cartón y revolviese de colorines, puestos de anisados, y del hombre que , botijo al hombro, voceaba el refrescante pregón de "agua de limón fría como la nieve"

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Leí alguna vez sobre las gentes del sábanu, que venían de la meseta en tren a darse esos baños de ola, agarradas a la maroma y muertas de miedo dentro del agua.

Y también lo de darse los nueve baños de septiembre, que sería muy bueno para la salud, que no sé si es superstición, tradición gijonesa o tendrá razón de ser, que si la temperatura tal, o que si hay más yodo en el agua. Bueno, muchos tratamientos de balneario tienen duraciones parecidas, de diez días o dos semanas.

Anónimo dijo...

Esta semana una asociación de mujeres recordaba los baños de ola de septiembre, vestidas en trajes de baño de hace un siglo. Y comentaba estos días el asunto en el periódico un paisano que decía, que hacía unos años que ya no iba a los baños de septiembre, pues en su última vez pisaba colillas, restos del carbón y porquerías en la arena, se encontró con restos como compresas en el agua y al salir del baño con la piel sucia de aceitillos, cogió dermatitis y se le quitaron las ganas de repetir más años.