Para muchos paseantes de la Calle llamaba poderosamente la atención las vitrinas publicitarias que se colocaron en Los Moros. No era desde luego una publicidad al uso, centrada en carteles impresos, aquí se veía claramente el producto a la venta , o al menos una representación que por tamaño o otras circunstancias se pudiera ver en la vitrina. (En la imagen un expositor junto a la histórica El Cometa)
A mí me recordaba las que había en Berlín en Inter Der Linden y daban un toque de modernidad y, por qué no, seguridad a la imagen de Gijón.
Aún teníamos a un clásico , el Tívoli y sus sillas de plástico trenzado en las terrazas..
A mí me recordaba las que había en Berlín en Inter Der Linden y daban un toque de modernidad y, por qué no, seguridad a la imagen de Gijón.
En Corrida había otro estilo de vitrinas, pero también se hizo un esfuerzo de modernidad. Se terminaba la época de la gran carpa corrida (nunca mejor dicho) que alojaba mesas y sillas de las cafeterías.
Aún teníamos a un clásico , el Tívoli y sus sillas de plástico trenzado en las terrazas..
Todo aquello no duró mucho y , de nuevo, llegaron otras ideas y otra forma de ver la publicidad y la urbanidad de nuestras calles.
Fuentes:Guía práctica de Gijón 1992, Crónica de la Calle Corrida P Aduriz.
5 comentarios:
la realidad es que Corrida, más céntrica y peatonalizada desde mediados de los años '80, es el centro de la zona y todo el mundo va ahí, se camina mejor, un entorno más amistoso, la calle los Moros ya puede hacer virguerías que es la calle lateral al barrio y sobre todo, le falta la peatonalidad, fue declinando poco a poco y es una batalla perdida a no ser que cambien los gustos de la gente mucho.
El Tívoli cafetería y marisquería, trae recuerdos del Gijón clásico del último tercio del s. XX. Que ocupó el lugar del antiguo Manacor buf ese no lo conocí ni cerca ¿ya hará como un cuarto de siglo que cerró el Tívoli?
Conocilu, pero ahora con vagos recuerdos juveniles de domingos, junto al resto de locales de lo que algún periodista local llamó en su día la Vía Véneto gijonesa, que en aquellos años de aperturismo y desarrollos turístico y constructivo, que se juntaba con el legendario Oriental, el Mayerling, el Express, el Alcázar, cafeterías Guinea, Montana y la freiduría Yuste de imperial escudo en fachada a la que sucedió la boutique Brighton en el hueco que dejó cuando cerró.
Es nefasto ver cada día más locales cerrados, Menéndez Valdés, avenida de la Costa etc da mala imagen a la ciudad y al turismo. Y triste verlo así con lo que fue.
Sí hay que reconocerlo la calle Corrida llama más que los Moros por todo lo dicho.
y hace veintipico años también estaban las banderas que pusieron en los Moros que mucha gente se quejaba que eran estorbo para caminar.
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